El poliestireno, considerado como uno de los plásticos de difícil degradación y uno de los mayores contaminantes del planeta, da un sorpresivo giro en cuanto a las recientes investigaciones del Instituto Oceanográfico de Woods Hole en EE.UU., los cuales señalan que este producto podría degradarse en poco tiempo bajo factores como la luz solar.
Para ello, los investigadores hicieron experimentos en donde observaron que al exponer este plástico ante una lámpara, la cual emite rayos similares a los de la luz solar, descubrieron que se producía un efecto de oxidación en el material, produciendo C02 y carbono orgánico, conllevando a que el material desaparezca en menos tiempo de lo advertido.
“Simplemente mire los juguetes de plástico de los patios de recreo, los bancos de los parques o las sillas en los jardines, que se decoloran rápidamente”, señaló uno de los autores del estudio, Collin Ward, quien señaló que existen restricciones severas respecto a la tesis sobre el carácter casi perpetuo del poliestireno.
“En este momento, los legisladores generalmente asumen que el poliestireno se conserva para siempre en el medio ambiente. Eso es parte de la justificación para redactar las políticas que lo prohíben”, sostuvo Ward, quien, además, comentó que con ello no intenta descartar las consecuencias negativas de la contaminación por dicho plástico.
K.V.C.
