Cambio climático: las termitas lo acelerarán

Aumento de las temperaturas y expansión poblacional de las termitas aumentaría la producción de CO2

Estudio destaca que la expansión poblacional de las termitas tendría graves consecuencias en el medio ambiente. Foto: https://sp.depositphotos.com/home.html

Estudio afirma que la propagación de las termitas a causa de un clima más cálido provocaría un incremento del calentamiento global porque aceleraría la descomposición de la madera muerta y en consiguiente, multiplicaría las emisiones de metano y dióxido de carbono (CO2).

La investigación internacional, realizada en un trabajo en conjunto del Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), la Universidad de Lleida (UdL), el CREAF, el CSIC, Agrotecnio y la Universidad de Alcalá, estuvo liderada por Amy Zanne de la Universidad de Miami (Estados Unidos) y fue publicada por la prestigiosa revista Science.

En ese sentido, el catedrático contratado de la UdL e investigador de la unidad mixta CTFC-Agrotecnio, José Antonio Bonet destaca que según estimaciones moderadas del calentamiento global “a mediados de siglo podemos prever su expansión (de las termitas) en las regiones subtropicales (fenómeno conocido como tropicalización), lo que representaría un aumento del 14% de la superficie con una alta actividad de termitas a nivel mundial alcanzando los 45 millones de km2”.

Aumento de Temperatura

El estudio indica un dato muy importante con respecto a los cambios de temperatura causados por estos insectos donde, según informa, por cada aumento de temperatura de 10 ° C, las termitas incrementan 6,8 veces más la descomposición de madera, convirtiéndolos en organismos más sensibles al calor que los hongos o microbios, encargados de la misma labor.

“Las emisiones de carbono de las termitas durante la descomposición de la madera son 3 veces mayores a las de los microbios, algo que no tienen en cuenta los modelos climáticos actuales basados ​​únicamente en los microbios”, explica el profesor de la UdL y coordinador de la unidad mixta CTFC-Agrotecnio, Víctor Resco de Dios.

En ese sentido, el profesor Josep Peñuelas del CREAF-CSIC añade que al subir las temperaturas “las termitas son tan sensibles que comen mucho más y liberan más carbono de la madera en forma de metano y dióxido de carbono, que son dos de los mayores gases de efecto invernadero en este proceso, así pues, el impacto de las termitas en el planeta podría ser enorme”.

Almacenes de Carbono

Los bosques actualmente cuentan con aproximadamente 676,000 millones de toneladas de biomasa y la madera muerta es un gran almacén de carbono a nivel global. En esa línea, los científicos aseguran que la sensibilidad de las termitas y los hongos a la temperatura y las precipitaciones jugará un papel clave en la determinación del equilibrio de carbono de los ecosistemas terrestres, es decir, si se almacena o se pierde a medida que se calienta el planeta.

«Con el cambio climático, el área de distribución de estos insectos aumentará, amplificando ese efecto de liberación de CO2 que actualmente no recogen los modelos climáticos», enfatiza Resco.

«La alta sensibilidad a la temperatura de las termitas significa que cualquier estimación global del almacenamiento y la facturación de carbono de la madera que ignore la descomposición que realizan predecirá erróneamente el ciclo de carbono, sobreestimando el almacenamiento en grandes regiones del mundo», añade.

Finalmente, la investigación es considerada el primer análisis a escala mundial sobre la capacidad de respuesta de las termitas que se alimentan de madera y los hongos descomponedores a los cambios en las condiciones climáticas, replicando un mismo experimento en 133 lugares de 6 continentes.