Según testigos y fuentes policiales, dos sujetos a bordo de una motocicleta interceptaron la unidad y realizaron al menos diez disparos. Dos proyectiles impactaron cerca del parabrisas, poniendo en riesgo al conductor, mientras que los demás alcanzaron el lado derecho del vehículo, donde viajaban varios pasajeros con destino a Chiclayo.
Aunque no se registraron heridos, el ataque provocó momentos de pánico entre los pasajeros. A pesar del atentado, el chofer no se detuvo y continuó su recorrido hasta llegar al distrito de Chocope, donde solicitó apoyo policial.
La primera hipótesis de la Policía Nacional del Perú (PNP) apunta a un posible caso de extorsión. Emtrafesa ya fue víctima de amenazas similares en el pasado. En 2023, otro de sus vehículos fue atacado en circunstancias parecidas, y se denunció la exigencia del pago de un cupo de 100 mil soles.
Tras el ataque, la Policía inició las investigaciones para identificar a los responsables y determinar si detrás de estos atentados opera una organización criminal.
A pesar del atentado, este martes 15 de abril las operaciones de la empresa continuaron con normalidad en su terminal de Trujillo, ubicado en la cuadra 1 de la avenida Túpac Amaru. Sin embargo, la incertidumbre y el temor persisten entre los usuarios y el personal de la empresa.
