Bakú, la ciudad de los contrastes

Una ciudad multicultural, multiétnica. En la foto: las Flame Towers

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Ricardo Sánchez Serra

En Bakú, capital de Azerbaiyán, se conjugan modernidad, casco antiguo y edificaciones de la era soviética.

Al visitar la Ciudad Vieja, encontramos una fortaleza, que fue incluida por la Unesco en la Lista del Patrimonio de la Humanidad. Fue construida en el siglo XII, durante el mandato del Shirvanshah (rey) Manuchohr III.

El palacio de los Shirvanshah

La fortaleza durante su historia repelió a numerosas invasiones y sus fortificaciones en varias épocas fueron demolidas o modernizadas para el crecimiento de la ciudad.

Pared de la primera fortaleza, siglo XII
Lugar de descanso de los comerciantes de la Ruta de la Seda. En remodelación.
En la Ciudad Vieja habitan unas 3.000 personas
Instrumento musical antiguo, en el museo-palacio
Maqueta de la Ciudad Vieja
Pisos alfombrados del palacio
Armas antiguas de doble cuchilla

En la Ciudad Vieja también se encuentra la Torre de la Doncella, asimismo del siglo XII, aunque algunos historiadores estiman que es más antigua. Cuenta la leyenda, que una joven princesa se arrojó -desde la torre, que en ese momento daba al mar- y murió, al no aceptar el matrimonio consentido por su padre con un príncipe que ella no amaba, entre otras versiones.

La Torre de la Doncella, centro de mágicas leyendas

Otros investigadores afirmaban que la torre era el templo del fuego de los zoroastrianos; y que excavando había una construcción más antigua que pudo ser un observatorio astronómico.

Contraste

En la parte moderna, destacan los tres rascacielos de fuego o Flame Towers, en donde funcionan, un hotel, departamentos y oficinas. Recibieron el Premio Internacional MIPIM 2013 al mejor hotel y centro turístico. Representan la antigua adoración al culto del fuego.

En la puerta de la Asamblea Legislativa. A mi espalda las Flame Towers
Bulevar del mar Caspio
Bakú, la Venecia del Cáucaso
Entrada al palacio
La invasión armenia a Karabaj, de principios de los ´90, provocó que un millón de azerbaiyanos huyeran de la persecución. El Gobierno del presidente Aliyev, construyó complejos habitacionales, como estos, para albergarlos. Luego de la Guerra de los 44 Días del 2020, Azerbaiyán recuperó su territorio. Los desplazados ya quieren regresar a sus hogares, pero los cientos de minas terrestres armenias lo impiden.
Bakú de noche y con luna llena
El mar Caspio
En el mar Caspio con destacados colegas periodistas de México, Gabriel Moyssen; Costa Rica, Denis Mora; y Perú, Carlos Linares, acompañado del diplomático azerí, Emin Alasgarli.

Además, sus museos impresionantes como el de las Alfombras, el Heydar Aliyev y el Templo del Fuego. A estos dos últimos lamentablemente no pudimos visitar por falta de tiempo.

El Museo de las Alfombras

Lo mejor de la ciudad son sus habitantes, cordiales, amistosos y hospitalarios, orgullosos de su pasado, multicultural y con una gastronomía espectacular.

El centro comercial
Obras de los pintores de la calle, al igual que en el parque Kennedy de Miraflores
Sede del Congreso de Azerbaiyán
Interior de la sede de la Asamblea Legislativa azerí
Local en donde se encuentran la mayoría de los Ministerios de Azerbaiyán
Sede del Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán
Ajedrez, el deporte ciencia preferido de los azerbaiyanos
Gastronomía azerbaiyana
Comida muy deliciosa
Fotos Ricardo Sánchez Serra