En un trágico incidente ocurrido en Cajamarca, Lucinda Caja, una cobradora de la empresa de transporte público Rutas Divinas, fue asesinada a tiros por dos desconocidos mientras desempeñaba su labor en la carretera a Cumbemayo, cerca del kilómetro 6. Según testimonios de testigos, los agresores llegaron en una moto y dispararon a quemarropa, causando la muerte instantánea de la víctima. Este violento ataque no solo dejó a su familia devastada, sino que también encendió alarmas sobre la creciente inseguridad en el sector del transporte público en la región.
El ataque se produjo en presencia de su pareja, quien estaba al volante y no sufrió lesiones. Lucinda, reconocida por su dedicación y amabilidad, era la menor de siete hermanos y su pérdida ha dejado un vacío inmenso en su familia. Su hermana, Sebastiana Caja, ha exigido justicia y ha pedido a las autoridades que aceleren las investigaciones para dar con los responsables de este horrendo crimen.
Las primeras indagaciones apuntan a que el asesinato podría estar relacionado con casos previos de extorsión que han afectado a la empresa Rutas Divinas, que ha sufrido ataques similares en el pasado. Este contexto ha generado una creciente preocupación entre los vecinos y trabajadores del transporte público, quienes han manifestado su temor ante el aumento de la violencia en la zona.
Tras el ataque, agentes de la Policía Nacional y personal de Serenazgo llegaron rápidamente al lugar para iniciar las investigaciones pertinentes. Además, representantes del Ministerio Público se hicieron presentes para realizar el levantamiento del cadáver, que posteriormente fue trasladado a la Morgue Central de Cajamarca. La comunidad espera que las autoridades actúen con rapidez y eficacia para esclarecer los hechos y garantizar la seguridad de quienes se dedican al transporte público.
