El oído absoluto es la habilidad innata en el ser humano de identificar las notas musicales por su nombre, sin la ayuda de una nota referencial. Esta capacidad está íntimamente ligada con la memoria auditiva; mientras más recopilación sonora, más amplio el universo musical.
El estudio publicado en la revista Journal of Neuroscience asegura que dicha capacidad sería de origen genético y no una habilidad aprendida, como aseguran algunos entendidos del tema.
Mozart, Bach, Frank Sinatra, Freddie Mercury y Michael Jackson, son algunos de los artistas que poseían dicha capacidad, muestra de ello es su amplio legado musical, que a pesar del paso de los años permanece vigente.
Según los resultados del estudio liderado por Keith Schneider, de la Universidad de Delaware, indican que el cerebro de los músicos con oído perfecto presenta una anomalía, lo cual genera que su corteza auditiva sea más grande que el resto de músicos y voluntarios.
Pero no todo es perfecto para los poseedores de tal don, pues esa misma capacidad de captar hasta el sonido más insignificante, los condena a escuchar hasta la más mínima desafinación, lo cual les resulta más complicado al momento de trabajar en conjunto con orquestas o grupos musicales.
A.G.P.