La OMS admitió el término ‘burnout’ o el ‘síndrome del trabajador quemado’ como una enfermedad. Incluyéndola en la Clasificación Internacional de Enfermedades y se concretará el 1 de enero del 2022, donde oficialmente se llamará de esa forma.
Es relacionado con el debilitamiento mental, emocional y físico generado por el estrés del trabajo. Es la reacción del organismo frente los factores estresantes, emocionales e interpersonales que se visualizan en el trabajo.
Es un ‘síndrome’ que ataca en silencio pero implacable con el transcurso de los años. Si no se detecta a tiempo puede conllevar a una profunda depresión.
Existen tres características para identificar esta enfermedad:
-El sentimiento de debilitamiento o cansancio.
-Aislamiento del trabajo, cinismo o pesimismo en el trabajo.
-Baja productividad y efectividad profesional.
Según Enrique de la Casa, especialista en capacitación y desarrollo de Business Training Solutions Perú, recomendó el tener pausas activas con breves descansos durante la jornada de trabajo para la regeneración de la energía y el desempeño.
Lo importante es dejar de sentirse mal en el recinto laboral, solo tener una pausa para busca el balance de nuestro estado.
J.P.L.O.