El juez supremo César San Martín, quien está a cargo del pleno casatorio que resolverá la reglamentación de los delitos de lavado de activos, señaló que casos como el de Joaquín Ramírez se podrán volver a revisar en caso se defina un juicio distinto al de la casación 92-2017.
“Las causas que están en trámite o impugnadas, desde luego que sí, en la medida en que de la sentencia plenaria surja un criterio distinto al de la sentencia casatoria en cuestión (92-2017)”, afirmó en declaraciones a Ideele Radio.
Sobre Joaquín Ramírez, ex secretario de Fuerza Popular, se seguía un proceso de investigación que buscaba aclarar el origen de los US$7 millones de su patrimonio. Sin embargo, hace unos días, el caso fue archivado por la fiscal Sara Vidal, quien citó la casación 92-2017 en su resolución final.
La mencionada casación fue punto de polémica, debido a que establece que para fijar el delito de lavados de activos se debe acreditar la relación con el origen del delito previo que lo produce.
A raíz de ello, César San Martín presidió hoy el pleno casatorio que busca que se establezca una “regla de modo definitivo” en esta instancia. Agregó que para lograr una sentencia plenaria casatoria se necesitan “ocho votos conformes con todo” y que en “dos o tres semanas” se debería conocer la decisión final .
“Mi intención que esto sea lo más rápido posible, porque queremos resolver un tema de cuestionamiento y sobre todo porque todo el mundo está en ascuas y esto no puede seguir así”, puntualizó.
El juez afirmó que espera que la sentencia final sea la más “sólida y firme posible” para calmar el ambiente jurídico “que está muy convulsionado por esta sentencia casatoria vinculante”.
Fuente: El Comercio
