Cuando el presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski, concedió el indulto al expresidente Alberto Fujimori, recibió una serie de críticas que se desató en marchas para demostrar la molestia que había originado en gran parte del Perú, pues para muchos, la impunidad ganó y Kuczynski no cumplió con lo prometido.
Cabe resaltar que la Corte Interamericana de los Derechos Humanos realizará una audiencia pública el 2 de febrero, para revisar e inspeccionar sobre las sentencias de los casos de la Cantuta y Barrios Altos, además de las reparaciones indicadas por dicha corte, del mismo modo sancionar a las personas implicadas en estas masacres cometidas en el gobierno de Fujimori.
“El indulto a Alberto Fujimori ha sido un duro golpe para los derechos humanos en el continente, y particularmente para las víctimas y sus familiares. Es imperativa la exigencia que se haga al estado peruano para que cumpla de manera íntegra con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.
La liberación anticipada, incluso por razones humanitarias, en ninguna circunstancia debe implicar la extinción de la condena ni representar una medida que perpetúe la impunidad”, agregó Erika Guevara Rosas, Directora para las Américas de Amnistía Internacional.
Además, la Amnistía Internacional, indicó a la Corte IDH, que el Estado peruano hasta la fecha no ha presentado documentos con las justificaciones que acrediten que Fujimori Fujimori estaba delicado de salud y que no debía estar en las condiciones carcelarias en las que se encontraba.
Además, esta organización ha presentado un documento ante la corte, denominado amicus curiae (amigo del tribunal), el cual es un informe escrito que se puede presentar por cualquier persona ya sea natural o jurídica para defender un interés de transcendencia, y en este se señala que el Estado peruano aún no presenta los documentos solicitados que acrediten el indulto otorgado a Fujimori el pasado 24 de diciembre.
G.S.O.
