De acuerdo con la Asociación Brasileña de Trasplante de Órganos (ABTO), en 2017 hubo un aumento del 14 % en la tasa de donantes efectivos. En la primera mitad del año, el país alcanzó el número de 17 donantes por cada millón de personas, aproximándose a su meta de 18 donantes.
Si bien se encuentra en el segundo puesto a nivel mundial en el número absoluto de trasplantes de riñón, Brasil ocuparía el puesto número 33 tomando en cuenta la realización de esos procedimientos con relación al tamaño de la población. El año pasado, 42 % de las familias rechazaron la donación de órganos de su pariente a causa de una muerte encefálica comprobada.
“En la mayoría de los casos, el rechazo ocurre por la falta de información. Algunos no entienden cómo se da la muerte encefálica y creen que los órganos pueden ser retirados antes de que el pariente muera. Sin embargo, esto no sucede. El criterio para comprobar la muerte encefálica es muy riguroso”, mencionó Américo Cuvello, coordinador del Centro de Neurología y Diálisis del Hospital Alemán Oswaldo Cruz.
Si desea ser un donante, es necesario conversarlo con la familia. Ningún tipo de documento que exprese la voluntad de ser donante puede autorizar el retiro de órganos.
“Es fundamental que exista una conversación, porque en aquel momento el paciente no tiene más control sobre su cuerpo, por lo que alguien va a tener que decidir sobre el”, afirmó Eduardo Pinto, jefe del Centro Avanzado de Trasplantes de Órganos y Tejidos del Hospital San Francisco en la Providencia de Dios.
Es posible ser donante de riñón e hígado aun estando con vida, esta donación puede realizarse con autorización judicial.
“Ahora la vida es nueva con un órgano nuevo”
Rafael Nocito, Analista de Sistemas de 64 años
“Cuando tenía 48 años, me extirpé el riñón izquierdo debido a una sospecha de tumor maligno, que no se confirmó. En 2015, comencé a hacerme hemodiálisis y entré en la lista de espera. Me siento muy bien, hoy tengo una vida tranquila. Ahora es una vida nueva con un órgano nuevo”.
Lista de espera
De acuerdo con la última publicación de la ABTO, 32 716 personas esperan por un órgano en Brasil, de las cuales 706 son niños.
Y.A.S.