Una operación conjunta por parte de las autoridades argentinas y rusas, permitió la madrugada de hoy incautar un total de 389 kilos de clorhidrato de cocaína de alta pureza, que se encontraba almacenada en un anexo de la embajada rusa en Buenos Aires, los cuales estaban camuflados dentro de 16 valijas dentro de las instalaciones del anexo.
La estrategia seguida por parte de los investigadores para dar con los involucrados en este caso de narcotráfico fue cambiar las maletas con la droga por otras idénticas, pero que en su lugar llevaban como contenido harina, a las cuales se les puso también dispositivos de monitoreo, las cuales seguirían la ruta de las maletas una vez puestas en el avión.
Con esta acción pudieron rastrear el destino de las maletas, que al llegar a Moscú, camufladas cómo parte de valijas diplomáticas, fueron recogidas por dos personas, que fueron arrestadas por la policía rusa. Por otro lado en Argentina fueron arrestadas dos personas involucradas en la red de narcotráfico.
Hasta el momento, la policía maneja la hipótesis de que el líder de la organización, conocido como el “señor K” se encontraría prófugo en Alemania, aunque aún no se ha realizado arresto alguno en ese país. Cabe resaltar que la investigación para dar este golpe le tomó un año a la policía de ambos países, que según detallan tuvieron que ser pacientes para encontrar pruebas del delito.
L.I.P.R