Aunque la idea de ser picado por varias agujas no es muy atractiva, es muy usado para calmar el dolor y mejorar el flujo sanguíneo, basándose en la creencia de que la energía vital viaja por una red de canales afectando nuestra salud física, mental y espiritual.
Sirve para calmar diversidad de dolores como las contracturas en el cuello, migraña y diversos tipos de lesiones, ayudando a calmar dolores articulares por artritis y artrosis.
Sabiendo esto se puede aplicar a personas de cualquier edad como adultos jóvenes, adultos mayores, e incluso mujeres embarazadas, no olvide siempre tratarse con gente especialista en este ancestral tratamiento.
En el Perú hay cuarenta centros de salud que incluyen servicios de medicina complementaria aplicando este método como el centro de medicina de estilo de vida del Hospital de la Solidaridad.
Aunque sea un gran método, no debe ser un sustituto al tratamiento convencional y debe ser utilizado como un método complementario el cual aportara mucho a la recuperación de sus malestares.
J.A.G