El presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski, hace algunas semanas, cursó una carta a la comisión Lava Jato del Parlamento Nacional señalando que jamás tuvo una relación ni directa ni indirecta con Odebrecht ni por temas profesionales ni comerciales.
El último sábado, a través de un medio radial, tuvo que admitir que sí había brindado asesoría al consorcio H2Olmos, vinculado a Odebrecht.
PPK incluyó en su declaración jurada de intereses, publicada el 31 de enero de 2017, en el diario oficial El Peruano, que Westfield Capital fue su empresa unipersonal de asesoría de banca de inversión.
Hoy jueves, la comisión Lava Jato informó que Odebrecht pagó 782 mil dólares a Westfield Capital, empresa unipersonal del mandatario por siete consultorías. Los pagos se realizaron entre 2004 y 2007 por los proyectos Olmos e IRSA Norte (tramos 2 y 3). PPK fue ministro de Economía desde febrero del 2004 hasta agosto del 2005 y presidente del Consejo de Ministros desde agosto del 2005 y julio del 2006. Los cuatro pagos realizados a Westfield Capital coinciden con PPK como funcionario público en el Gobierno de Alejandro Toledo.
En todas las ocasiones en que PPK fue invitado por el grupo de trabajo, dijo que responderá por escrito ya que aseguró que la Constitución Política no lo obliga a comparecer ante ninguna comisión investigadora durante su mandato.
Por respeto al Perú y a los electores que lo ungieron como presidente de la República usted nos defraudó, perdió toda credibilidad y confianza.
Como lo señalé en febrero de este año, cuando se fugó el presidente Toledo usted tiene responsabilidad política por ser parte del Gobierno de Toledo, pero con el pago recibido usted usufructuó del cargo siendo funcionario público y eso es un delito.
El único camino si aún tiene un mínimo de dignidad es renunciar y pedir disculpas al pueblo peruano.
Un presidente que miente reiterativamente, es un miserable.
C. ALFREDO VIGNOLO G. DEL V.