Todo tipo de productos plásticos, maderas y objetos de acero formaron un manto enorme de basura y desperdicios contaminantes en el mar del Caribe. La reconocida fotógrafa británica Caroline Power, fue quien denunció lo sucedido. Cabe resaltar que esta escena abarca desde las islas hondureñas, Roatán y Cayo Cochinos.
«Había una cantidad aparentemente infinita de tenedores, cucharas, botellas y platos de plástico», había balones de fútbol rotos, cepillos de dientes, una televisión y muchos zapatos y chanclas». «Una vez que la basura está en el océano, resulta increíblemente difícil y costoso eliminarla. La clave es detener la basura antes de que llegue al océano», mencionó Power.
Asimismo, a consecuencia de las tormentas que se presentaron en el Caribe y América Central el cual llevó consigo kilómetros de basura desde Guatemala hasta Honduras. Sin embargo, la comunidad es culpable por que no existe un sistema de recolección de desechos.
A.C.P
