Rilama Hamer de nacionalidad neerlandesa ha vivido unos de los momentos más impactantes de su vida que seguro no olvidará, ya que un día como cualquiera compró en una tienda una cámara web que se encontraba en descuento para conectarla a internet y poder vigilar a su perro a través de ello.
Hamer jamás imaginó que sería vigilada por el equipo tecnológico, cuenta que el dispositivo lo dejó conectado al Wi-fi y que cuando ella se dirigió hacia la cámara, pues del equipo susurraron diciendo «Bonjour madame [Buenos días, señora]», a lo que ella respondió con temor «Hola, ¿hay alguien allí?», a lo que la cámara responde: «Bonjour madame, tout bien avec vous? [Buenos días, señora, ¿todo bien con usted?]».
Ante este hecho Rilama quedó en shock y prefirió apagar la cámara para luego devolverla a la tienda donde la adquirió. Hasta lo que se conoce que las autoridades correspondientes han iniciado las investigaciones pertinentes.
F.G.H
