Madre detenida por apuñalar a sus hijos en Chicago enfrenta juicio

Los menores de 1, 3, y 5 años siguen graves y luchan por su vida en el hospital, ella admitió que quería morir junto a ellos.

El pasado 28 de mayo fueron encontrados 3 niños con heridos de arma blanca en la vía pública, en el vecindario de South Harvard Avenue, al sur de la ciudad, la principal sospechosa fue la madre de 23 años residente de Chicago identificada como Aurionah-Rakii-Karie Parker-White la cual fue detenida.

Los oficiales informaron que los menores de 1, 3 y 5 años fueron trasladados en estado grave a un hospital pediátrico de la ciudad. Los niños fueron hallados por un conductor de grúa identificado como DeVaughen Stringfellow que notó la presencia de un bebé sangrando, con un pañal ensangrentado, que andaba caminando por la calle.

Según declaraciones del propio conductor, la madre del menor salió del edificio en el que vivían gritando que necesitaba ayuda. DeVaughen Stringfellow afirmó que, al no recibir respuesta inmediata de la policía tras realizar una llamada, decidió transportar a los tres niños todos con heridas visibles en las muñecas junto a la mujer hasta un hospital cercano. Posteriormente, los menores fueron trasladados al Comer Children’s Hospital de la Universidad de Chicago, donde permanecen internados en condición grave, según informó NBC Chicago.

Los menores de 1, 3 y 5 años permanecen hospitalizados en estado grave. Por otro lado, la Fiscalía del condado de Cook afirma que la mujer confesó los hechos y se declaró culpable de intentar asesinar a sus tres hijos menores. Durante la audiencia judicial iniciada el 31 de mayo, los fiscales afirmaron que Aurionah-Rakii-Karie Parker-White confesó haber cometido el ataque y declaró que deseaba morir junto a sus hijos.

Las autoridades confirmaron que los tres niños son hijos de Parker-White y que las heridas fueron provocadas con un objeto punzante. La policía de Chicago abrió una investigación y coordinó con los servicios de protección infantil para evaluar la situación familiar de los menores.

Tras la declaración del hijo de 5 años, quien contó al equipo médico que su madre intentó matarlos, repitiendo que quería «enviarlos al cielo», la madre sigue detenida y a la espera de su condena, mientras las autoridades continúan con las investigaciones correspondientes. La agresora admitió haber atacado a sus hijos porque se sentía sobrepasada por el deber de cuidarlos sola, ya que es madre soltera, y confesó que deseaba suicidarse y llevarse a sus hijos con ella para que tampoco sufrieran.

En este caso, cabe resaltar la importancia de la salud mental, porque no es comprensible cómo una madre puede ser capaz de atentar contra la vida de sus propios hijos, apuñalarlos y continuar a pesar de sus súplicas. Las autoridades deberían supervisar la salud mental de los padres o tutores de menores de edad.