El incremento de la violencia en la capital peruana se ve reflejado en un reciente hecho sangriento. Gustavo Adolfo Mesías Guillén, de 31 años y conocido con el alias de «El Mesías», fue abatido por ocho disparos dentro de su vivienda ubicada en la cuadra 4 del jirón Guisse, en el Callao, una de las zonas más conflictivas del distrito.
El homicidio ocurrió alrededor de las 8:45 p.m. del 26 de abril de 2025. De acuerdo con información policial, un atacante no identificado logró escalar hasta el techo del inmueble y forzar su entrada, sorprendiendo a la víctima y disparándole repetidas veces sin darle oportunidad de reaccionar. Aunque fue trasladado de emergencia a un centro médico, Mesías Guillén falleció a los pocos minutos debido a la gravedad de sus heridas.
Tras ejecutar el crimen, el agresor escapó rápidamente del lugar. La Policía Nacional del Perú, junto con personal de criminalística, llegó poco después para iniciar las investigaciones, recolectando evidencias y declaraciones que ayuden a esclarecer el caso.
«El Mesías»: presunto ajuste de cuentas contra líder criminal del Callao
La muerte de Gustavo Mesías ha generado gran atención entre las autoridades, ya que se trataba de un individuo conocido por la unidad del Grupo Terna. Según informes policiales, encabezaba la organización criminal “Los Malandros”, dedicada al tráfico de drogas y otros delitos violentos en el primer puerto.
Además, se le vinculaba con una red familiar con fines delictivos, compuesta por su pareja Andreina Arrieta Maura, alias “Beba” estilista reconocida en el medio limeño, y su padre, Víctor Jhon Mesías, apodado “Lobo”, quien fue detenido con pasta básica de cocaína.
Operativo previo reveló drogas escondidas en su búnker
Días antes del asesinato, la policía realizó un operativo en el domicilio de Mesías Guillén, encontrando más de un kilo de marihuana escondido en muebles y cojines. El cabecilla contaba con antecedentes por robo agravado (2017), tráfico de drogas y lesiones (2020), lo que lo convertía en un objetivo de alto riesgo para las fuerzas del orden.
Cabe mencionar que un día antes del crimen, en la misma calle se registró otro tiroteo que dejó un hombre muerto, generando temor entre los vecinos por la posibilidad de enfrentamientos entre bandas rivales.
Las autoridades presumen que la ejecución de “El Mesías” estaría relacionada con un ajuste de cuentas entre grupos delictivos que disputan el control territorial y el comercio ilegal de drogas al menudeo, una actividad que mueve grandes sumas de dinero ilícito en la zona.