Por María Zajárova
Portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia
El 1 de febrero marca un aniversario significativo en las relaciones entre la Federación de Rusia y la República del Perú. En este día hace 55 años (en 1969) las relaciones diplomáticas entre nuestros países, que el año pasado alcanzaron el hito de 160 años, alcanzaron un nuevo nivel: la apertura de Embajadas. Esta es una buena ocasión para recordar una vez más nuestras largas tradiciones de amistad y cooperación mutuamente beneficiosa que unen a Rusia y el Perú, los sentimientos de simpatía y solidaridad entre los pueblos ruso y peruano que han pasado la prueba del tiempo.
Recordamos que el primer embajador en Moscú fue el brillante diplomático peruano Javier Pérez de Cuéllar, quien más tarde fue elegido Secretario General de la ONU.
Queremos destacar el carácter no coyuntural de las relaciones bilaterales, que son invariablemente amistosas. Estamos dispuestos a seguir fortaleciendo el diálogo político y la cooperación multifacética con el Perú en beneficio de nuestros pueblos y en aras de la construcción de un mundo multipolar más democrático y justo, basado en los principios de igualdad de derechos y soberanía de los Estados.
Deseamos éxitos a nuestros colegas peruanos en su responsable tarea de presidir este año APEC, el principal foro de la región Asia-Pacífico, en el que representantes de Rusia y Perú colaboran para potenciar el crecimiento económico y la prosperidad de la región.
(Nota de Redacción: Al cierre de la publicación de esta nota, la Cancillería peruana, en forma inexplicable, ignoró y ni respondió sobre este acontecimiento, perdiendo las formas y la cortesía. Funcionarios talibanes y atávicos no deben tener sitio en Torre Tagle, hacen mucho daño a las relaciones internacionales)