“Es indignante que tengamos altos índices de anemia. Es un pecado. Esas cifras son vergonzosas. Es indignante que en un país donde podemos conseguir tanta comida, suceda esto”. Estas fueron las expresiones del padre Gastón Garatea, miembro del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, al conocerse la información del alto índice de anemia en el Perú entre los niños de cero a 3 años: 42.5% —2 de cada 5—, según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar 2022 (Endes 2022).
Asimismo, sostuvo que el gobierno debe hacer un esfuerzo para abaratar el precio de los alimentos y propuso que las parroquias se transformen en lugares de acopio para gente de escasos recursos. Además, añadió: “La anemia es un escándalo. ¿Cómo es posible que en 2023 tengamos anemia y no hagamos lo necesario por solucionar esto? Tenemos que trabajar con mucha fuerza para desterrar la anemia de nosotros”.
Óscar Aquino, también integrante del Grupo Impulsor Inversión en la Infancia tuvo cuestionamientos sobre el alto índice de anemia que reflejó la encuesta. Mencionó que hay más de 555,000 niños menores de tres años con anemia. “Esto es como llenar de 10 a 12 veces el Estadio Nacional”, explicó.
Es más, lamentó que tanto el premier Alberto Otárola como la presidenta Dina Boluarte no tomen como prioridad esta problemática. “Se ve con cierta indiferencia por parte del Estado. La anemia es un tema que trasciende la infancia; va relacionado con el desarrollo del país”, declaró.
Por último, anunció que su organización prepara un curso que se enfocará en mejorar la gestión de recursos, dirigido especialmente para los alcaldes y gobernadores. Además, se requiere que el padre Gastón Garatea se pueda reunir con el Poder Ejecutivo.