Nathali Rubio Yllatopa, exauxiliar del despacho de la congresista Rosio Torres Salinas, se presentó ayer ante la Comisión de Ética Parlamentaria, para dar su testimonio contra la legisladora de Alianza para el Progreso, acusada de presunto recorte de sueldo a sus trabajadores.
Rubio Yllatopa, durante su presentación en la Comisión de Ética, aseguró que Torres Salinas, le solicitaba la mitad de sus bonificaciones, entre ellos el de escolaridad y los viáticos que el Parlamento le entregaba por semana de representación.
La extrabajadora afirmó haber entregado dinero directamente a la parlamentaria, además, contó que en una ocasión dio a Fernando Meléndez, esposo de Rosio Torres y excandidato al gobierno regional de Loreto, la mitad de los 1800 soles que el Parlamento le daba como viáticos para acompañar a la congresista en sus viajes de representación.
“La última vez que entregué mi viático fue al señor Meléndez en su casa en Iquitos. Mi bono de cada seis meses, se lo entregué a ella en un sobre en la puerta de su domicilio en Jesús María, y la escolaridad, en su mano”, aseguró.
Asimismo, explicó que no denunció este hecho en su momento por la necesidad de trabajo, y por ser madre y padre para sus hijos. «No denuncié a la congresista en su momento porque soy madre y padre, y tengo que trabajar. Estuve en silencio por mi trabajo», señaló.
Luego del testimonio de Nathali Rubio, la sesión pasó a ser reservada a pedido de la congresista Rosio Torres.
“Mi pedido es para ir a sesión reservada porque tengo cosas muy personales, que incluyen a otras personas y yo respeto y no quiero herir susceptibilidades, por eso quiero ir a una sesión reservada”, dijo la parlamentaria.
El grupo de trabajo presidido por Karol Paredes, respaldó el pedido de la congresista y fue aprobado con 10 votos a favor y 2 en contra.
