¿Puede el sol artificial de China causar una catástrofe global?

Ante la actual situación de calentamiento global, causada por la explotación de combustibles fósiles, los científicos prueban nuevas fuentes de energía limpias y abundantes en los países más desarrollados. Uno de ellos es China, que se jacta de su ‘sol artificial’, el cual no para de mostrar avances significativos desde que comenzó a funcionar en 2006.

Ante la actual situación de calentamiento global, causada por la explotación de combustibles fósiles, los científicos prueban nuevas fuentes de energía limpias y abundantes en los países más desarrollados. Uno de ellos es China, que se jacta de su ‘sol artificial’, el cual no para de mostrar avances significativos desde que comenzó a funcionar en 2006.

¿Cómo funciona?

El ‘sol artificial’ chino, llamado oficialmente Tokamak Superconductor Experimental Avanzado (EAST, por sus siglas en inglés), es una estructura metálica con una cámara de vacío interior en forma de rosquilla y un aparato en el centro que crea un poderoso campo magnético.

Dentro de la rosquilla se inyecta una nube gas compuesta por deuterio y tritio, átomos pesados de hidrógeno. El gas se carga eléctricamente debido al campo magnético y se convierte en plasma. Aquí, en la Tierra, no es posible replicar la presión del núcleo de una estrella, pero ello se compensa elevando la temperatura del plasma hasta 100 millones de °C, aproximadamente.

A estas temperaturas extremas, el deuterio y tritio comienzan a fusionarse y formar helio. De esta forma, replican la producción energética del Sol.

La elección de deuterio y tritio se debe a que causan mayor ganancia de energía que otras versiones del hidrógeno. Asimismo, el primero se obtiene del agua de mar; mientras que el segundo, más raro en la naturaleza, se puede fabricar a partir de la propia fusión nuclear combinada con litio.

¿Puede causar una catástrofe?

Por su nombre, la fusión nuclear puede ser confundida con la fisión nuclear, la reacción que tiene lugar en las plantas nucleares comerciales.

La fisión nuclear ocurre cuando los átomos pesados, como el uranio, se desintegran en otros más ligeros, lo que produce energía. No obstante, si el proceso no es debidamente controlado, las partículas libres pueden seguir impactando átomos y dividiéndolos indefinidamente, creando una reacción en cadena y una posterior explosión. Eso fue lo que sucedió en Chernóbil en 1986.

En cambio, la fusión nuclear no puede producir una reacción en cadena debido a dos factores: usa una cantidad de átomos limitada (1 gramo de deuterio-tritio es suficiente para generar la misma energía que 1 tonelada de carbón) y está contenida por un campo magnético que, en caso de disiparse, dejaría que el plasma se enfríe. Por lo tanto, el nivel de riesgo del “sol artificial” es bajo.