El asilo para la esposa del exmandatario Pedro Castillo, Lilia Paredes, empezó a gestionarse cinco meses antes de llevarse a cabo el frustrado golpe de estado del expresidente, según información de la Fiscalía de Perú.
A través de las investigaciones preliminares realizadas por el Ministerio Público, emitidas mediante un reportaje por El Comercio, se señala al ex subsecretario presidencial Beder Camacho como el presunto encargado de llevar a cabo las gestiones con las autoridades mexicanas para el asilo de Lilia Paredes.
Según la información brindada, Camacho se reunió con el embajador de Venezuela en Perú, Alexander Yañez Deleuze a mediados de agosto para gestionar el asilo de la ex primera dama, del sobrino de Castillo, Fray Vásquez y del exministro de Transportes Juan Silva.
Las coordinaciones se realizaron después de que se ordenara la detención de la cuñada de Castillo, Yenifer Paredes y otras personas vinculadas al expresidente por el presunto delito de organización criminal y la confesión de Hugo Espino con respecto a las presuntas actividades ilícitas realizadas en coordinación con el poder Ejecutivo.
Según las capturas de WhatsApp mostradas por El Comercio, Yañez le ofreció a Camacho proporcionarle el número del Embajador de México en Perú, Pablo Monroy, para que se comunicara con él. “Dile que es de mi parte, ya él (Pablo Monroy) sabe que lo vas a contactar, pero no sabe tu nombre», le habría dicho a Camacho. Esa misma noche, el subsecretario presidencial se habría comunicado con Monroy, pidiéndole «un espacio en su agenda» para el día siguiente. Las capturas también revelan que a la mañana siguiente, tuvieron una cita a las 11:30 am en la embajada de México.