Por: Alejandro Marco Aurelio Capcha Hidalgo.
Periodista: Reg. N°.– 4654 –
Señores lectores, es muy doloroso recordar que en la historia del Perú registra en la década de los 90, que el presidente constitucional y después dictatorial, Alberto Fujimori Fujimori, asestó un autogolpe el 05 de abril de 1992, dizque con miras de ordenar la economía, y combatir el terrorismo, y otros componentes institucionales y, con ello difundir, ridiculizar a las instituciones demócratas con los famosos periódicos CHICHAS que lo administraba el malévolo pseudo periodista, Bresciani, en coordinación con el asesor de Fujimori, el perverso Vladimiro Montesinos cuyo objetivo era difamar, injuriar, insultar sistemáticamente a los políticos de la oposición poniéndoles en apuros gratuitamente, por ello reitero, y certifico que no hay que perder la perspectiva porque es ahí donde se origina, y se continúa la CARICATURIZACIÓN, de las instituciones autónomas (lo que son equilibrios de poderes) como lo muestra el actual gobierno de Pedro Castillo, comprando consciencia a muchos congresistas que pertenecen al primer poder del Estado, asimismo a otras instituciones como; el Ministerio Público, Poder Judicial, Jurado Nacional de Elecciones, y otras que tienen vinculaciones estrechas con el poder Ejecutivo para operar y beneficiarse a favor de sí mismo con un gobierno de perfil totalitario.
Los malos ejemplos siempre quedan como tintas indelebles, y lo continúa descaradamente el letargo ideal comunista de Pedro Castillo, quien perteneció al MOVADEF y CONARE, antes llamado Sendero Luminoso, quien avanza a pasos agigantados a entornillarse en el poder ante la evidencia, pasiva e indiferencia de los parlamentarios. El gobierno de Castillo con algunas estrategias variantes al estilo y directrices del socialismo siglo XXI, y asesorado por el embajador de Cuba, gallo Carlos Zamora, un tipejo misterioso y conocedor de crear caos, confusión en un país, de ello ya tiene mucha experiencia, y se suman los oportunistas de los caviares para ser eco de su pantomima de la victimización, del campesino, que llegó al poder y no lo dejan trabajar la derecha que gobernó hace doscientos años. Una fábula que le está adicionando rédito al gobierno.
Pero sin embargo el Ministerio Público dice todo lo contrario la gestión de Castillo Terrones, durante un año y tres meses, tiene un rosario de 194 elementos de convicción de supuesta corrupción. Asimismo, la fiscalía presidida por la respetada doctora, Patricia Benavides quien ha enviado la denuncia constitucional conforme a Ley al Congreso de la República para que aplique la hermenéutica legislativa, y en su oportunidad el pleno tendría su veredicto de la vacancia.
Como se sabe, Castillo tiene denuncias por supuestos actos de corrupción, y lo más quebrantado es a su imagen como primer funcionario del Perú, que es la presidencia de la República. La fiscalía lo denuncia como presunto líder de una organización criminal el cual está incriminado sus familiares, amigo al margen de los niños topos en el congreso.
Para ello, Pedro Castillo ha convocado a una serie de “asesores” para salir de esta torpeza generado por él. Desde que asumió la presidencia, que, por inocencia o viveza despachó desde la calle Sarratea del distrito de Breña.