El alcalde de Anguía, Nenil Medina Guerrero, detenido por su participación en el caso de fraude en el desarrollo de obras públicas calificadas por el Decreto de Urgencia 102-2021, realizó un viaje el último 27 de mayo en avión de la FAP con integrantes del gabinete ministerial.
Según la lista de pasajeros, también fue parte del viaje de el exministro de Vivienda y Construcción, Geiner Alvarado López, según documentos oficiales de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), que ejecuta el avión presidencial, difundidos por el Centro Liber del Instituto Prensa y Sociedad (IPYS).
La Fiscalía de la Nación y el Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder siguen investigando al mandatario Castillo, al exfuncionario Alvarado y el regidor Medina por la emisión del Decreto de Urgencia 102-2021 del 29 de octubre del 2021, que acreditó el financiamiento de 20 obras públicas realizadas por el entorno cercano del presidente, grupo conocido como “Los Chiclayanos”.
El vuelo del 27 de mayo de 2022 tuvo como destino Chachapoyas, Amazonas, donde se realizó un Consejo de Ministros, por lo que destaca la presencia de Medina, quien se encuentra bajo prisión preventiva.
Según testimonios de colaboradores eficaces y testigos protegidos, el alcalde Nenil Medina era miembro de “Los Chiclayanos”, un equipo de paisanos y empresarios que financiaron la campaña presidencial de Pedro Castillo, entre ellos se encuentra Segundo Sánchez Sánchez, Salatiel Marrufo Alcántar y Abel Cabrera Fernández.
Cabrera fue quien le sugirió al mandatario Castillo designar a Geiner Alvarado como titular de Vivienda, y este nombró a Salatiel Marrufo como jefe del Gabinete de Asesores del mismo despacho.
Para recuperar su inversión en la campaña del presidente Castillo, “Los Chiclayanos” lograron que Salatiel Marrufo y Geiner Alvarado firmaran 20 obras públicas de su interés en el Decreto de Urgencia 102-2021, que costeó proyectos de saneamiento y agua potable.
Entre estos proyectos se encuentran cinco escogidas por el alcalde Medina por un total de 9,6 millones de soles y cuatro por 4.9 millones de soles de Salatiel Marrufo. En el primer caso, fueron obras desarrolladas en el distrito de Anguía, y en el segundo, en el distrito de Cumba, Amazonas.
Estas labores fueron otorgadas a empresarios que estaban implicados con las autoridades. Uno de ellos fue Hugo Espino Lucana, quien reconoció frente al Equipo Especial de Fiscales contra la Corrupción del Poder que pagó al alcalde Medina una coima del 10 % del total de la obra de tres millones de soles que se dio mediante un trámite fraudulento.
Karla Villegas Gonzales