El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha señalado que “toda Europa está bailando al borde de una crisis económica mundial debido a las sanciones» que decidieron imponer en bloque a Rusia como respuesta a su operativo militar contra Ucrania.
El funcionario decidió realizar estas declaraciones durante la primera jornada de la cumbre de líderes de la Unión Europea, la cual se llevó a cabo en Bruselas. Orbán también señaló, a pesar de ello, Budapest rechazó la propuesta realizada por la Comisión Europea de prohibir el uso del petróleo ruso en Hungría.
«Ya tenemos suficientes problemas sin eso. Los precios de la energía son altos, la inflación es alta y toda Europa está bailando al borde de una crisis económica mundial debido a las sanciones. En tales circunstancias, habría sido insoportable para nosotros tener que hacer funcionar la economía húngara con un petróleo más caro. Eso hubiera sido como una bomba atómica. Pero esto se ha evitado», agregó.
Por otro lado, durante la reunión en Bruselas, el presidente señaló que su objetivo actual es lograr pactar una serie de medidas sancionadoras contras Moscú y, para ello, se acordó que «los países que reciben petróleo a través de oleoductos puedan continuar operando en las antiguas condiciones […] las familias pueden dormir tranquilas esta noche».
Por el momento, Budapest se a mostrado en contra de la prohibición del uso de energía rusa, lo cual busca evitar el nuevo paquete de sanciones que además requiere ser aprobado por los miembros de la Unión Europea (UE) en su totalidad. El hecho se dio a conocer el lugar después que el bloque comunitario lograra el acuerdo parcial de un crudo ruso.