Lo que esencialmente se sabe es que la viruela había sido un virus que fue erradicado hace varios años, pero ahora resulta que nuevamente han surgido casos de la viruela símica, un tipo de viruela poco común. Se trata de una enfermedad endémica en África, cuyos síntomas son más leves que la erradicada viruela, pero puede ser mortal. Se dice que, la viruela del mono fue encontrada por primera vez en 1958 en una comunidad de monos de laboratorio y que el principal transmisor serían los roedores. En 1970 se detectó el primer caso de infección, dato otorgado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Actualmente, se vienen registrando casos y sospechas en países europeos, como es el caso de la ciudad de Madrid donde se sabe de siete casos de viruela de mono y otros 23 sospechosos. En Portugal se han confirmado tres casos, dos sospechosos y otros 15 bajo investigación. Mientras que en Reino Unidos, informan que tienen siete casos de personas que aseguran estuvieron de viaje en Nigeria.
¿CÓMO SE TRANSMITE?
Se sabe que la viruela de monos es capaz de infectar a conejos, ratas, monos, ardillas, perritos de praderas e incluso a humanos. Sucede de las siguiente formas: El humano puede adquirir el virus a través de la mordida de un animal infectado; a través de objetos contaminados como indumentarias o ropa de cama; el contagio entre humanos se puede dar a través de heridas o laceraciones expuestas de la piel; a través de secreciones respiratorias o saliva; a través de las heces; y las relaciones sexuales también es otra fuente de exposición.
Por otro lado, el contacto con animales muertos o vivos a través de la caza y el consumo de carne o animales silvestres son otros de los factores de riesgo conocidos.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?
Los síntomas de la viruela del mono son parecidos a los de la viruela, solo que un poco más leves. Puede presentarse con dolores de cabeza; fiebre (primer síntoma); dolores musculares; escalofríos; agotamiento; ganglios linfáticos inflamados; erupciones (esto comienza a aparecer en el rostro y suele extenderse a otras partes del cuerpo, estas generan mucho dolor y picazón).
Ahora, el período de incubación de este virus, contando desde la infección y aparición de estos síntomas, se da en un estimado de seis a 16 días, aunque esto puede variar entre los cinco a 21 días. El virus de la viruela del mono puede durar de dos a cuatro semanas, según la Organización Mundial de la Salud.
Otros datos específicos que por el momento ha brindado la OMS es que el diagnóstico definitivo de la viruela símica solo se se podría establecer mediante las pruebas de laboratorio, además que el propio síntoma de la inflamación de ganglios podría ser una manifestación clínica que resalta en su diferencia con el virus de la viruela humana.
Mientras tanto, no existe un tratamiento o vacuna contra la infección por el virus del mono. Esto se debe a que si bien algunos estudios demostraron que la vacuna antivariólica demostró su eficacia de un 85% en la prevención de la viruela del mono, el problema reside en que ya no está disponible a la población dado a que se efectuó su erradicación en 1979, por afirmación de la Organización Mundial de la Salud.
Cabe recalcar, que la viruela del mono no podría afectar a los mayores de 50 años, puesto a que la mayoría de estos, se cree, están vacunados de la viruela. Y es que, por contexto histórico, el mundo dejó de ser vacunado contra la viruela en 1972 y se tiene como registro que el último caso mundial conocido se detectó cinco años después, en África.
Sin duda alguna, estamos ante otra posible situación donde nos veríamos afectados por un nuevo virus que si bien registra un precedente, resulta incierto en las consecuencias que se podría generar en estos tiempos donde podemos apreciar que el hombre resulta ser muy vulnerable ante lo fascinante pero a su vez complejo que es la naturaleza y la salud.
Fuente: Diario Gestión.
B. R. P.
