Se ha descubierto nuevo virus de ARN en aguas oceánicas

Los virus son omnipresentes en todos los ámbitos de la vida y desempeñan un papel fundamental

El virus ARN tiene un papel como patógenos de animales y plantas, pero, en el medio ambiente no están muy estudiados. (Foto:ABC)

Un estudio realizado por científicos, han descubierto que en las aguas oceánicas de todo el mundo existen 5.500 nuevos virus de ARN, duplicando el numero de filos conocidos. Según los investigadores de la revista “Science”, los hallazgos amplían las posibilidades de investigación ecológica y remodelando nuestra comprensión de cómo evolucionaron estas pequeñas pero significativas partículas submicroscópicas.

Esta investigación ha descubierto varios virus de ARN que son desconocidos, haciendo que se dupliquen los conocidos. Ese filo es la subdivisión básica del reino animal y se puede definir como un grupo de animales en función de su plan organizativo. Por otro lado, esto permite reconocer mejor la importancia ecológica y los orígenes evolutivos de los virus de ARN.

Estos virus son omnipresentes en distintos ámbitos de la vida, además, cumplen un papel fundamental como impulsores de la diversidad biológica, el ciclo geoquímico global y la evolución. La distribución del virus ARN esta en todas partes del océano, para comprender sus diferentes funciones del viroma de la Tierra se centran en los virus del ADN, lo cual son diversos, abundantes y protagonistas de los ecosistemas.

Si bien es cierto el virus ARN tiene un papel como patógenos de animales y plantas, pero, en el medio ambiente no están muy estudiados. Estos autores descubrieron en los nuevos filos a Taraviricota, de distribución mundial, lo cual representa un eslabón perdido en los orígenes evolutivos de virus ARN en respecto a los retroelementos, lo que indica que ambos comparten un ancestro común.

Además, este hallazgo esta representando un conocimiento fundamental para que se pueda seguir integrando los virus ARN en diferentes modelos evolutivos, epidemiológicos y ecológicos. Jessica Labonté y Kathryn Campbell en una Perspectiva relacionada señalan que, “Estudios como este crean conexiones entre los mundos viral y celular, permitiendo la posibilidad de un árbol de la vida totalmente integrado y una comprensión más completa de los orígenes y la evolución de toda la vida”.