Por: Alejandro Marco Aurelio Capcha Hidalgo
Periodista: Reg. N° -4654-
El presidente, Pedro Castillo Terrones, primer funcionario del Perú, se ha convertido en el hazmerreír, de la ciudadanía, un mal ejemplo para los jóvenes del bicentenario. Su comportamiento díscolo, no está a la altura de un estadista para contraer sus funciones y adjudicarse como mandatario de una Nación; da mucho que hablar en la prensa nacional, e internacional. Ello inicia desde que asumió el cargo de primer mandatario, el 28 de julio de 2021, con una maratónica propuesta ilusas que, posteriormente lo desconoció groseramente con un cinismo peculiar de los postulados añejos comunistas; y poniendo en riesgo la estabilidad de la gobernabilidad en el país.
Posteriormente, Castillo, designó a un gabinete de Ministros, supuestamente con indicios de filo terroristas prontuariados, y que tienen nexo con MOVADEF, antes “sendero luminoso”; entre ellos se encontró al inefable ex premier, Guido Bellido, por apología, el ex ministro de trabajo, Maravi , por acciones revoltosos, en la década de los 80 en la ciudad de Ayacucho, y otros que fueron cayendo por su propia ineptitud, e irresponsabilidad en la conducción de las gestiones públicas, y nunca estuvieron a la talla de un ministro para ejecutar y resolver problemas álgidos del país, asimismo, actualmente están siendo investigados por el opaco gris del ministerio público que, lo dirige, la activa Fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos.
Avanzan los días, meses, y el país se acelera para confundirnos en el fondo del abismo de la muerte anticipada a la extrema pobreza, por la irresponsabilidad sistemática del presidente, Castillo, que se ahoga en un charco de Chota. Este señor no tiene norte, carece de propuestas objetivas, y desconoce la acepción de un Estado de Derecho; el presidente entra en su laberinto por su escasa preparación académica que, a través de su flamante premier, anti minera, Mirtha Vásquez declara de lo más profundo de su corazón rojimio, argumentos desafortunados que, espantan las inversiones mineras, y justifica, actos terroristas al estilo de “sendero luminoso” de una minera que, fue destruida salvajemente. Y en paralelo el inmaculado señor PUEBLO CASTILLO, se zurra ante las críticas de su nefasto gobierno, y lo reta a los ciudadanos reuniéndose en la CASA DE BREÑA, lugar que le sirvió en su campaña como candidato, más no puede congregarse como presidente de la República, porque estaría violando la Ley de transparencia y un falto de respeto a la investidura presidencial. Por todo lo esgrimido, Castillo debe ser -vacado- ya no da más, hay que ser sincero señores lectores, el presidente Castillo, ya no da más. Su objetivo del presidente, es si o si, la Asamblea Constituyente, y punto, para perpetuarse en el poder como lo indica su ideario de Perú Libre.
Tampoco les tengo ninguna confianza a los congresistas de la República que, disquen que nos representan, obvio con algunas excepciones, ellos lo saben, por las felicitaciones que les hago llegar a través del celular, o personalmente.
Pues señores, la gran mayoría de los ciudadanos, han despertado del sueño profundo de la opacidad, gracias a los mismos congresistas que tienen vocación de presentarse como lo son, pero carecen de transparencia porque defienden intereses subalternos de sus patrones que tienen universidades, empresas, y plata como cancha; otros por cuotas de poder. Los ciudadanos de a pie ya no son tontos, y dicen: tanto, tanto pero no culantro. Es lamentable que el primer poder del Estado caiga tan bajo, y se presten como esbirros de intereses; y se alejan del pueblo, que sabio que son, y es admirable su comportamiento. Otros congresistas más sinvergüenzas, solicitan regalos a empresas de diferentes rubros, como, mineras, pesqueras, agrícolas con el cuento que colaboren para comprar juguetes, y regalar a los niños pobres por navidad, encima se camuflan y pretenden mangonear utilizando nombres de terceros, que ni siquiera son de sus entornos. Ya pues compórtense, gasten de la suya, y no hagan daño a terceros, vergüenza les debe dar, si al menos tienen un poco de decoro y dignidad; al que le cae el guante que se lo chante, sinvergüenzas.
Señores lectores, vuestro país está viviendo una aguda crisis económica, política, institucional, y de gobernabilidad, tanto el ejecutivo y el legislativo deberían ser expectorados por los ciudadanos, y convocar a elecciones generales, por el bien del Perú, ya tenemos dos décadas perdidas en el manejo económico social. Basta de mentiras y leguleyadas. ¡¡¡El Perú es más grande que sus problemas!!!
