El agarrobo, árbol emblemático del norte del Perú.

El algarrobo, una especie emblemática e importante en el ecosistema de los bosques secos en el norte del Perú.

El algarrobo (Prospopis pallida) es una especie emblemática e importante en el ecosistema de los bosques secos en el norte del Perú. Está ligado a la vida de los pobladores, es historia y cultura. Su existencia depende de las lluvias que produce el fenómeno del niño y de su adaptación para vivir en zonas secas o áridas. Sin embargo, en la actualidad la tala ilegal ha degradado demasiado el hábitat de esta especie.

Es considerado como una especie de alta productividad y como un árbol multipropósito, debido a que tiene mayores usos en comparación de otras especies forestales de los ecosistemas de bosques secos. En tal sentido, es fuente para el desarrollo de otras actividades económicas como la ganadería de caprinos, ovinos y vacunos, ya que de él se puede obtener forraje de calidad, así como la apicultura, construcción de viviendas y para la industrialización de los derivados de la algarroba.

Además, en el aspecto socioeconómico permite el sustento de aproximadamente 400 mil familias mediante el aprovechamiento de la elevada durabilidad de su madera, ya que sirve como una fuente energética y un buen combustible de alto poder calorífico, especialmente en la leña y carbón, que tienen gran demanda en el mercado local, regional y nacional. Asimismo, sus frutos son usados de manera sostenible para producir harina, pan de algarrobo, toffees, miel, café de algorroba y otras muchas variantes más.

Alimento superior

También ha sido aprovechado desde tiempos ancestrales por los pobladores, quiénes tomaban diariamente el famoso yupisín, que viene a ser su fruto (la algarroba) cocinado. Esta bebida se solía tomar en el desayuno y contribuía a fortalecer el sistema óseo, motivos por el que nuestros ancestros eran bastante fuertes.

De sabor dulce y con mucho valor nutricional, la algarroba está catalogada como un superalimento ideal para proteger nuestro sistema inmune y mejorar las respuestas de nuestro organismo ante infecciones como la COVID-19; de aquí que el algarrobo se consolida como un vegetal de suprema importancia.

Sumado a esto, contiene vitaminas del complejo B(B1, B2, B3, B6, Y B9), C y E, tanto como minerales entre los que podemos señalar al yodo, magnesio, zinc, hierro, selenio, calcio y potasio, así como fibra, sacarosa, ácidos grados, glucosa y fructuosa, que aportan mucha energía.

En peligro de extinción

Por encontrarse en un ecosistema frágil, las amenazas son altas para el algarrobo, principalmente debido a las causas humanas que usan inadecuadamente el suelo o cambian su uso para otras actividades sin una adecuada planificación, como el sobrepastoreo del ganado que evite la prosperidad de la generación natural de árboles.

Otros de los motivos que lo vuelve vulnerable son los incendios forestales a causa de su ambiente árido, el mismo que en la última década ha generado que los algarrobos empiecen a secarse y morirse, siendo infectados por hongos y hasta virus.

Sin embargo, la tala ilegal de los bosques de algarrobos es una amenaza constante que ha degradado en demasía el hábitat de muchas especies, entre ellas, una de las principales que habitan aquí, los cortarramas peruanos. Entonces, existe un grave peligro para esta especie endémica y puede desaparecer si no conservamos los bosques de algarrobos.

J.H.C.P.