En el Congreso parece que no se cansan de presentar iniciativas legislativas que, lejos de ayudar a mejorar la educación superior, buscan desdibujarla. Mientras la Comisión de Educación investiga a la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), algunos de sus miembros, incluyendo a su presidente Luis Dioses (Somos Perú), han presentado varios proyectos de ley para crear nuevas universidades públicas y filiales. El objetivo no sería otro que el de ganar aplausos y votos para ellos y sus partidos. Justo en plena época electoral.
Según pudo conocer este diario, del 2 de junio al 23 de octubre se han presentado 15 proyectos que proponen crear nuevas universidades públicas y filiales. Las iniciativas fueron presentadas por parlamentarios de Alianza para el Progreso (5), Somos Perú (2), Acción Popular (2), Frepap (2), Podemos (1), UPP (1), entre otros.
A raíz de todas estas iniciativas, el pasado 23 de octubre, Dioses, muy apuradito, anunció que convocará “lo más pronto posible” a una sesión extraordinaria para que todas estas propuestas para crear nuevas universidades sean sustentadas.
“Los congresistas han presentado los proyectos en pleno ejercicio de su derecho de iniciativa legislativa para crear universidades en varias de sus regiones y han pedido que se agende para exponer cuáles son las necesidades”, expresó Dioses al diario Perú21.
PURO POPULISMO
La exministra de Educación Marilú Martens expresó a este diario que los proyectos no tienen sentido, dado que, para crear universidades públicas, estas deben respaldarse con sustentos técnicos y presupuesto, el cual está disminuido por encontrarnos en plena crisis de la pandemia del COVID-19.
“Son propuestas que van contra la Ley Universitaria y la decisión del Tribunal Constitucional, que señala que cualquier propuesta debe estar sustentada por instituciones como el Ministerio de Economía y de Educación”, explicó.
En el mismo sentido se pronunció el exministro de Educación Idel Vexler. “Espero que no prospere ninguna iniciativa. Hay que estar atento para que no se creen instituciones sin presupuesto y sin aseguramiento futuro de condiciones de calidad en estos centros de estudio, y que respondan a las necesidades fundamentales de cada región”, aseveró.
Martens agregó que las propuestas evidencian que los congresistas “no están trabajando por la búsqueda de una educación de calidad. Puede haber actores que promueven estas actitudes cuando estamos en plena época electoral. Crear universidades da réditos políticos y esa puede ser una de sus motivaciones”, acotó.
“Podría ser que las han presentado por estar en campaña. Son varias iniciativas que se enmarcan en el populismo político, así que, por eso mismo, dudo de que prosperen los proyectos”, agregó Vexler.
Por su lado, Dioses defendió las iniciativas (dos de ellas de su autoría) y aseguró que no existe ningún tipo de conflicto de intereses. “La comisión tiene un fin genuino de acercar la universidad pública en regiones donde no las hay. Pero si el tema de preocupación es que se creen universidades como en su momento lo hizo la Sunedu habilitando filiales en una ventana de la moratoria, no lo vamos a hacer”, expresó.
DEBATE PARALIZADO
Esta situación ha tomado lugar mientras no se ha puesto en debate del Pleno un dictamen que amplía la moratoria de creación y autorización de funcionamiento de nuevas universidades por dos años y de filiales por tres años, excepto las públicas.
Esta iniciativa surge de dos proyectos, uno presentado por el Poder Ejecutivo y el otro del congresista Moisés Gonzales (antes APP).
Precisamente, el dictamen se aprobó el 30 de junio (¡hace 120 días!) y desde entonces no se ha elevado al Pleno. Empero, adonde sí fue a parar, aunque no tiene relación con gastos ni inversión, es a la Comisión de Presupuesto, presidida por Humberto Acuña (APP), hermano del dueño de varias universidades en el país. El martes último fue aprobado el dictamen.
En tanto, Dioses mantiene en pie que de todas maneras realizará una sesión extraordinaria para debatir en el grupo de trabajo que preside la creación de universidades, creando quizás falsas expectativas en regiones y ciudadanos que son vistos como potenciales votos.

M.M.R.