En el año 1927, Augusto Pérez Araníbar, cirujano y filántropo de origen arequipeño se propuso crear una ciudad para los niños más indefensos de la capital.
Entre algunas obras de este notable médico, quien también había sido voluntario en la Guerra del Pacífico, se encuentra la construcción del Hospital Arzobispo Loayza, el Hospital del Niño y asilos de ancianos; siendo su obra emblemática el Puericultorio Pérez Araníbar, que hoy cumple 90 años desde su fundación.
Actualmente el puericultorio acoge a más de 200 menores que fueron abandonados, han sufrido de violencia familiar o han vivido en hogares disfuncionales. Sin embargo, la finalidad es que estos niños después de unos años regresen a sus hogares o sean adoptados.
Cecilia Hamann, Directora del Puericultorio Pérez Araníbar. Jorge Muñoz, alcalde de Lima. Guillermo Ackermann presidente de la Beneficencia de Lima. Foto: Álvaro Ugaz
Gracias al esfuerzo de profesionales especializados en psicología infantil, educación, nutrición, así como voluntarios de instituciones como: Sinfonía por el Perú, la escuela D1 de Vania Masias, entre otras, logran educar, cultivar, cuidar y proteger a estos menores de edad durante su periodo de permanencia.
No obstante, este hogar tuvo una etapa de decadencia cuando la administración pasó a manos del Estado. Sin embargo, el retorno del manejo privado y el compromiso liderado por el presidente de la Beneficencia de Lima, Guillermo Ackermann ha cambiado la situación para que la institución renazca.
La actual dirección a cargo de Cecilia Hamann de Pennano se ha trazado metas ambiciosas que permitan mejorar y dignificar la calidad de vida que estos niños, futuros agentes de cambio del siglo XXI, necesitan.
Recordemos que por el Puericultorio han pasado muchos peruanos notables del ámbito cultural, deportivo y político como el compositor Augusto Polo Campos, el ex dt de la selección peruana Miguel Company y el director de La Tarumba Fernando Zevallos.
G.D.I.
