Una de las medidas que habría propiciado el origen del incendio que ataca a la amazonia desde hace más de 17 días, sería el decreto supremo N° 3973 promulgado por el gobierno de Evo Morales el pasado 9 de julio, con el cual se aprobó el desmonte y quema “controlada” de bosques en los departamentos amazónicos de Santa Cruz y Beni, con el objetivo de limpiar el terreno para las actividades agropecuarias en esas tierras.
La medida generó la modificación del decreto supremo N° 26075 por el cual se estableció que “en los departamentos de Santa Cruz y Beni, se autoriza el desmonte para actividades agropecuarias en tierras privadas y comunitarias, que se enmarque en el manejo integral y sustentable de bosques y tierra, conforme a los instrumentos de gestión de la Autorización de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT), y sus planes de Uso de Suelo vigente (PLUS)”.
Luego de la crítica mundial sobre el tratamiento de la naturaleza por parte del gobierno de Morales, este último ha anunciado la creación de un Gabinete de Emergencia con el que se busca desplegar brigadas de bomberos, así como el contrato de un avión Supertanker para apagar las llamas que vienen consumiendo la amazonia que se encuentra en época de sequía.
Diversos grupos activistas exigen la derogación de la Ley 741 para declarar la inmovilización de los bosques que se vieron afectados para iniciar el proceso de restauración, prohibiendo el empleo de estas tierras para actividades agrícolas.
M.N.
