En el tercer día de los interrogatorios en Curitiba, Brasil, el exrepresentante de la empresa Odebrecht con sede en el Perú, Jorge Barata, confirmó la existencia de un Club de la Construcción que se encargó del pago de sobornos a funcionarios públicos del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) a favor de otorgarle obras públicas.
Barata señaló que conoció a dicho grupo y sus acciones en suelo peruano desde el 2001 hasta el 2012, tiempo en que dejó la representación de la empresa en el país. Asimismo, acotó que Renato Ribeiro Bortoletti y Raymundo Trindade Serra representaron a Odebrecht en las reuniones que conformaron dicho club, lugar donde se definían los turnos de las empresas para adquirir proyectos de transportes.
El exejecutivo nombró a las empresas que lo conformarían: Graña y Montero, Obrainsa, Cosapi, ICCGSA, Construcción y Administración (CASA), Hidalgo e Hidalgo; y las brasileñas: Andrade Gutiérrez, OAS y Queiroz Galvao.
El fiscal Germán Juárez Atoche, integrante del equipo especial Lava Jato, es el encargado de las diligencias de este caso y explicó que su investigación comprende desde el 2012 al 2014. El abogado de la empresa Graña y Montero, Gonzalo del Río, manifestó que el testimonio de Jorge Barata «no tiene relevancia» porque no habría participado en ninguna reunión del denominado Club de la Construcción.
«Sí, mencionó a muchas empresas, bajo el concepto de testigo de referencia, alguien le habrá contado, es un testimonio que no tiene ninguna relevancia desde el momento que él señala que no estuvo nunca en una reunión del club», finalizó el abogado.
S.V.Z.