Considerado uno de los cohetes más poderoso del mundo, el Falcon Heavy, de la empresa aeroespacial SpaceX, realizó su primera misión comercial desde Florida, en una demostración clave para la empresa del multimillonario Elon Musk, quién busca concretar diversos contratos con militares.
El Falcon Heavy, de 23 pisos de altura, despegó desde el Centro Espacial Kennedy de Florida con su primera carga para un cliente al transportar un satélite de comunicaciones para la firma de telecomunicaciones Arabsat, con sede en Arabia Saudita, la cual ofrecerá servicios de internet y televisión a través de África, Europa y Oriente Medio.
Luego de completar su misión en el espacio, el cohete central regresó para un aterrizaje exitoso en la plataforma de SpaceX a 645 kilómetros de la costa de Florida. En una prueba realizada 2018, el impulsor principal de Heavy no pudo aterrizar en la plataforma y se estrelló en el Océano Atlántico.
La empresa SpaceX, cuenta actualmente con el servicio de dos cohetes operativos: el Falcon 9, que realiza la mayoría de los lanzamientos y domina el mercado estadounidense (21 misiones en 2018), y el Falcon Heavy, el cual es utilizado para el transporte de cargas de peso mayor y en órbitas más distantes.
La misión es considerada un total éxito, sobretodo para el físico Elon Musk, quién otorgaba un 5-10 % de probabilidad de presentar fallas, pues se trataba de la primera vez que se realizaban pruebas a los propulsores Block 5 en un Falcon Heavy. Tanto los propulsores como otros artefactos expulsados en este viaje, se reutilizarán en futuras misiones.
K.V.C.
