Discriminación: el pan de cada día en nuestro país

“El peruano es enemigo de otro peruano”, es una frase que alguna vez hemos escuchado; sin embargo, no nos detenemos a analizarla, quizá porque queremos creer que no es verdad.

Durante el ochenio de Odría en los años 40, se inició el proceso de migración o “cholificación” como lo mencionan algunos libros de historia. Recordemos que para la época todavía quedaban la pequeña burguesía o los criollos, quienes, ante este proceso, empezaron a ver a sus compatriotas como menos. Los que venían a buscar un futuro mejor fueron abusados y explotados por quienes deberían haberles tendido la mano.

Los peruanos son susceptibles cuando escuchan calificativos como “cholo” o “serrano”, como si esas palabras fueran ofensas. Cabe recalcar que la segunda palabra usa el gentilicio correcto, ya que si eres de la costa eres costeño y si eres de la selva eres selvático.

Quién no se ha parado a leer alguna vez los tablones de trabajo o volantes pegados en los postes “se necesita joven provinciana para cuidar niños, cama adentro” ¿Cuál es la necesidad de hacer hincapié en “provinciana”? La razón abuso y explotación, muchas de estas “jóvenes provincianas” vienen con un sueño el querer superarse y sacar a su familia adelante, pero se ven truncados por personas inescrupulosas.

Lo mismo que sucede con nuestros compatriotas, se está expresando en los ciudadanos venezolanos. El rechazo a todo lo extranjero, la xenofobia, pero ¿qué tan doble cara podemos ser? porque es de conocer que siempre el peruano le ha abierto las puertas y tratado como “rey” a un extranjero, siempre prefiriendolos a ellos antes que a sus hermanos peruanos.

La gran influencia de los medios de comunicación también ha incrementado el rechazo hacia los ciudadanos venezolanos, con titulares amarillistas que se redactan para provocar el morbo. Es un hecho lamentable que si la noticia no tiene morbo no vende.

Foto: La República
Foto: La República

Ricardo Morán, productor y jurado del programa “Yo soy”, se pronunció el año pasado a través del programa y redes sociales acerca del brote de xenofobia. La razón de su pronunciamiento fue que aceptó a tres ciudadanos venezolanos en el programa de concurso. En aquel comentario expresó su pesar por la situación ocurrida en su país, luego agregó: “Lo único que quiero decir es que no hay fuerza más poderosa y positiva para los países que la migración. El recibir gente que viene de otros lugares, con otras costumbres, con otros puntos de vista y talentos, lo único que hace es enriquecer nuestro Perú”.

Nuestro país siempre ha sido considerado pluricultural, porque contamos con diferentes culturas que se unificaron para crear otra, la invasión de la Corona Española también trajo otras costumbres, lo mismo sucedió cuando vinieron los chinos coolies a trabajar en haciendas. Venezuela también acogió a gran cantidad de compatriotas durante un época lamentable, y también sufrieron de xenofobia.

“Si un venezolano que llega aquí, sin dinero, sin familia y sin contactos, te quita tu trabajo, entonces el problema eres tú. Nosotros hemos recibido durante años a miles de peruanos que han venido porque han pasado por la puerta sin ensayar, sin caracterizarse. Estos tres ciudadanos que no tienen nada aquí están vestidos, caracterizados, ensayados y haciendo el esfuerzo para conseguir su lugar”, agregó el productor.

Muchos venezolanos han venido a trabajar de manera honrada y sacrificarse porque tienen una familia que los espera, que están sufriendo escasez de la canasta básica sin medicinas, pero también han venido personas inescrupulosas que quieren todo fácil.

“Justos pagan por pecadores”

Aprendamos a ser tolerantes y a educarnos, es la única forma de dejar la ignorancia. Ayudemos no solo a los extranjeros sino también a nuestros compatriotas, tendamosles la mano porque no todos son cortados por el mismo molde. No miremos a nadie por encima del hombro.

Nuestro país se ha formado por varias emigraciones e inmigraciones.

Solo la educación nos salvará de la ignorancia.

F.M.C.