El caso sobre la muerte de una mujer que durante dos años se dejó picar por abejas para aliviar las contracturas musculares y el estrés, cuestiona la eficacia de este tratamiento. La mujer de 55 años que residía en Madrid, después de la primera picadura comenzó a tener dificultades para respirar. Tras perder la conciencia su terapeuta trato de reanimarla con esteroides. Ya en el hospital, entró en coma y falleció después de estar varias semanas internada. Esta es la primera muerte que se reporta en el mundo y que es producida por el tratamiento con veneno de abejas.
La apiterapia es un tipo de medicina alternativa que se usa para fines curativos. Este tratamiento usa productos apícolas de la colmena como la miel, el polen, la cera, la jalea real y el propóleo, etc. Para algunos, la apiterapia se remonta a épocas del antiguo Egipto, Grecia o China y aunque su uso no este avalado por estudios clínicos, se cree que puede ayudar a combatir enfermedades como la esclerosis múltiple.
Las páginas que promueven su uso aseguran que tras la picadura de abeja se produce una inflamación que genera una respuesta del sistema inmune. La Fundación para la Esclerosis Múltiple (Reino Unido) informó que «no hay investigaciones que demuestren que sea un tratamiento efectivo para las personas con esta enfermedad».
Un estudio de 2008 sobre los enfoques no convencionales para aliviar los dolores descubrió que solo había un mínimo porcentaje sobre la apiterapia.
Una de las principales defensoras en el medio del espectáculo es la actriz Gwyneth Paltrow, quien durante una entrevista al New York Times, aseguró que usaba con frecuencia la apiterapia. «Me han picado las abejas. Es un tratamiento de miles de años llamado apiterapia. La gente lo usa para deshacerse de la inflamación y las cicatrices. De hecho, es bastante increíble si lo investigas. Pero, hombre, es doloroso».
Por otro lado el actor escocés, Gerard Butler, reveló que el año pasado fue inyectado con veneno de 23 abejas para reducir una inflamación. Al término fue directo al hospital pues sintió que el corazón le iba a explotar además de un hormigueo interno.
«Los riesgos de someterse a la apiterapia pueden exceder los presuntos beneficios, lo que nos lleva a concluir que esta práctica es tanto insegura como desaconsejable», aseguró Ricardo Madrigal-Burgaleta.
Asimismo, la directora de servicios cínicos de alergia de Reino Unido, Amena Warner, considera que el público debe tomar conciencia sobre los problemas que puede traer el uso de veneno de abeja. «Conlleva riesgos y, en individuos susceptibles, puede provocar reacciones graves que amenazan la vida».
C.V.M