Andrés Hurtado, apodado ‘Chibolín’ en el mundo de la televisión, enfrentará una prisión preventiva de 18 meses impuesta por el Poder Judicial. Esta decisión surge en el contexto de una investigación que indaga posibles delitos relacionados con cohecho, corrupción y tráfico de influencias. La medida se toma después de la detención preliminar del presentador, quien supuestamente habría aprovechado sus conexiones para llevar a cabo gestiones indebidas y recibir sobornos.
«Dictar prisión preventiva por el plazo de dieciocho meses contra el imputado Andrés Avelino Hurtado Grados (…), quien se encuentra con mandato de detención preliminar; el mismo que se computa desde el día 19 de septiembre de 2024 hasta el 18 de marzo de 2026», se lee en el documento oficial.
El juez Juan Carlos Checkley Soria ha decidido imponer comparecencia con restricciones para la fiscal Elizabeth Peralta y el empresario Javier Miu Lei. Esta resolución del tribunal responde a la petición del Ministerio Público, que argumentó el riesgo de fuga y la posibilidad de interferir en el curso de la justicia. Aunque se consideraron factores como el arraigo, la decisión se tomó a pesar de los esfuerzos de Hurtado por justificar su libertad durante el procedimiento, el 26 de septiembre, la Segunda Fiscalía Suprema Transitoria Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos solicitó la prisión preventiva por un periodo de 18 meses para los tres individuos bajo investigación.