La venerada Cruz de Motupe cumplió 150 años desde que fue hallada en 1898. Los feligreses asistieron en masa para celebrar una de las festividades religiosas más populares de la región Lambayeque y del país entero. Se calcula que más de 20 mil devotos asistieron a la misa oficiada el 5 de agosto, su día central.
La ceremonia religiosa en honor del santo Madero estuvo dirigida por el Nuncio Apostólico, Nicola Girasoli, principal representante de la Santa Sede y del Papa en el Perú. Lo acompañaron el Obispo de la Diócesis de Chiclayo, Robert Prevost Martínez, y otros obispos y diáconos del país.
Durante su homilía, Prevost destacó la celebración de los 150 años del hallazgo del sagrado madero con la presencia de una numerosa feligresía, que pese a la elevada temperatura que se registró, asistieron en grandes cantidades, tanto feligreses y visitantes nacionales como extranjeros.
Al mismo tiempo, saludó la visita del representante del Papa en el país, monseñor Nicola Girasoli, para acompañarlos en esta fiesta del pueblo de Motupe y de los fieles católicos. Asimismo, dio la bienvenida a los Obispos Héctor Vera (Ica) y Daniel Turley de Chulucanas.
En la parte central del estrado se encontraba la santísima Cruz de Motupe, así como un manto de plata y oro. La acompañaban la imagen de la Virgen del Cisne de Loja (Ecuador) y del Señor Cautivo de Ayabaca (Piura).
A. V. C.
