Estados Unidos ingresó nuevamente al ojo de la tormenta a nivel mundial, y esta vez por un tema alejado con ser el país más afectado por el Covid-19, sino por planear explotar recursos en la Luna. De acuerdo con la información obtenida por Reuters, Donald Trump habría firmado desde inicios de abril una orden ejecutiva donde pretende intenciones de convertir en una mina al único satélite natural de la tierra.
De la misma manera, el presidente estadounidense con esta estrategia de ambición espacial busca romper el Tratado del Espacio Ultraterrestre que se firmó junto a 109 países en 1967, donde señala que ningún país puede reclamar como territorio soberano a un cuerpo celestial o precisamente la Luna.
Con este acontecimiento, Trump busca aliarse con Canadá, Japón, la Unión Europea y los Emiratos Árabes, dejando fuera del camino a China y Rusia, este último comparte con los norteamericanos la Estación Espacial Internacional. Por su parte, el vicedirector general de Roscosmos, Serguéi Savéliev, mediante la web advirtió las consecuencias que podría generar la invasión de un territorio en aras.
Entretanto, el gobierno de los Estados Unidos en conjunto de la NASA dispone mandar a una mujer a la Luna en el 2024. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) busca con este viaje mejorar el mapa geológico más completo de la historia, que reduzca los errores anteriores.
J. I. R.
