Lluvias abundantes, tormentas eléctricas e, inclusive, ciclones y huracanes son de los desastres que, «La niña» ha iniciado y que afectan a casi toda Latinoamérica, Centroamérica, Norteamérica y el Caribe, provocando grandes cantidades de muertos, heridos y damnificados a lo largo y ancho de su paso.
Entre algunos de los países que han sufrido los estragos de este fenómeno natural se encuentran, Venezuela, Trinidad y Tobago, Puerto Rico, El Salvador, México, Estados Unidos, entre muchos otros. En estos países, a los daños en la infraestructura pública y privada que ya valen millones de dólares por su cuenta, se le agregan las multimillonarias pérdidas materiales en los sectores económicos.
La ganadería, agricultura telecomunicaciones, energía eléctrica y los servicios de agua potable fueron los sectores más afectados por la pérdida de los materiales de operación que fueron destruidos o dañados por los diferentes siniestros que se hicieron presente durante el paso de La Niña.
Cabe resaltar que, no en todos los países afecta de igual manera, por ejemplo, en países como Perú, Chile, Argentina, Paraguay, el sur de Brasil y Uruguay, etc, se manifiesta causando una gran, alargada e intensa sequía, la cual afecta directamente la generación de energía hidroeléctrica, la producción de alimentos, seca ríos, lagos y humedales, y causa incendios forestales, entre otras afecciones.