La noche del 09 de agosto, el mandatario Pedro Castillo, calificó de “allanamiento ilegal” el accionar del Ministerio Público y el equipo especial de la Policía Nacional (PNP) tras el intento de detención a su cuñada e hija adoptiva Yenifer Paredes.
A través de un mensaje a Nación, el presidente manifestó que la diligencia llevada acabo en el Palacio de Gobierno forma parte de un “plan mediático” que pretende tomar el poder de forma “ilegal e inconstitucional”, además de incluir la propuesta de inhabilitarlo por 5 años en el Congreso.
“Hoy Palacio de Gobierno y la casa presidencial una vez más han sido violentados con un allanamiento ilegal, avalado por un juez coincidentemente cuando se está solicitando el pedido de mi inhabilitación por cinco años para arrebatarle al pueblo peruano su legítimo gobierno”, enfatizó.
A su vez, el jefe de Estado, comentó que desea mejorar la comunicación con los parlamentarios desde hace más de un año. Sin embargo, los resultados no son los esperados, pues, las únicas respuestas que recibe giran entorno a la vacancia presidencial.
“Quienes hoy buscan quebrantar el orden constitucional y democrático son los mismos que denunciaron un fraude electoral inexistente para desconocer mi elección, recurriendo con tal fin incluso a los organismos internacionales”, precisó.
Bajo esa misma línea, indicó que existiría una “confabulación entre una parte del Congreso, la Fiscalía de la Nación y un sector de la prensa para desestabilizar el orden democrático”. Por ese motivo, realizó un llamado a todos los compatriotas para que el orden democrático prevalezca.
“Hago un llamado a las fuerzas democráticas, a los peruanos y peruanas a unirse en defensa del Estado de derecho, el orden democrático y la voluntad popular. Podrán tener medios, podrán tener dinero, pero no tienen al pueblo”, concluyó.
