La visita del Papa Francisco a Chile y Perú ha generado mucha expectativa entre los millones de fieles católicos que aguardan los días para recibir al Sumo Pontífice, pero también mucha suspicacia entre los detractores de la visita, que aducen por un lado es un gasto innecesario, por otro, un factor de distracción a los problemas nacionales de ambas naciones sudamericanas.
Por ello, muchos se preguntan, ¿qué hay detrás de la visita de Francisco I, más allá de la exaltación de la fe católica? La respuesta está en el seno de la Iglesia católica y en el contexto social latinoamericano, que se prestan al accionar del Papa que pretende reivindicar el papel ejercido por la Iglesia para con sus fieles.
Francisco I llega en un momento crítico del catolicismo en Chile y Perú, en el que los numerosos casos de abuso sexual, entre los que destacan el caso Karadima en Chile y el caso Sodalicio en Perú, han mellado la credibilidad de en dicha institución religiosa en ambas naciones, en las que las encuestas reflejan un bajo nivel de aprobación en comparación a otros países de la región.
Debido a ello, es que ellos ven en su condena e investigación de estos casos, en coincidencia de la visita a ambos países, un intento de levantar a la Iglesia Católica de las sombras y reconciliarla con la opinión publica peruana y chilena, de hacer sentir realmente que su llegada al Pontificado ha representado un cambio del decir y hacer de la Iglesia y de su figura principal.
Es preciso señalar que su visita también coincide con un panorama político incierto, con la elección de Piñera para presidente y el creciente descontento social en la sociedad chilena, y con la crisis de gobernabilidad en el Perú, asuntos en los que algunos esperan un llamado de Su Santidad a la paz y la calma, mientras que otros consideran inoportuna la visita de Francisco debido a las circunstancias.
Cualquiera sea el caso, no cabe duda que la visita del Papa y el recuerdo de esta perdurará por mucho tiempo en la mente de los peruanos y chilenos, tanto en aquellos que la esperan como en quienes la critican y que dará que hablar durante todo el año.
L.I.P.R
