Desde el 2015 Lima Metropolitana viene trabajando para que combis, cústeres y buses con más de 20 años de antigüedad sean dados de baja entre el 2015 y 2017. Esta medida se dio ya que la contaminación ambiental y la congestión vehicular es un factor que va en aumento.
En febrero del 2015, el entonces vocero del Programa de Chatarreo, José Zenozián, se comprometió a que más de 3 mil vehículos antiguos se iban a retirar del parque automotor entre 2015 y 2017. A los dueños de aquellas combis, cústeres y buses que pasen los 20 años de antigüedad y cuyas rutas se superponen con la del Metropolitano y la Línea 1 del Metro se lograría retirar gracias al plan con el que se entrega entre 4 mil y 10 mil dólares.
El Municipio de Lima a este momento se encuentra lejos de alcanzar su meta ya que lleva solo 3 mil vehículos chatarreados, con los que contaba superar la cifra que dio de baja la administración de Susana Villarán entre el 2012 y el 2014.
Según cifras de Protransporte en el 2015, la gestión de Castañeda logró chatarrear 665 cústeres y buses con más de 20 años de uso, esto produjo la reducción de 20 mil toneladas de contaminación por CO2, así como también, tuvo una inversión de 3 millones 753 mil millones de dólares.
En los dos años siguientes se registró una disminución en la cifra, en el 2016 se alcanzó a retirar de las pistas y destruir casi 400 vehículos deteriorados que brindaban servicio de transporte público. En lo que va del 2017 solo se han chatarreado 155 combis, cústeres y buses.
